Durante la semana antepasada más de 400 personas vieron “El Afroymarapuche” el montaje de la compañía MB2 que mezcla el diseño de máscaras, iluminación, animación y música, creando una propuesta escénica muy entretenida para el público familiar.
Esta es una obra de teatro que nos muestra el encuentro entre un muchacho comerciante, quien mientras recolecta aceitunas para vender en el mercado, se encuentra con uno de los últimos Afroymarapuches, un ser místico que conoce los secretos de la tierra y las estrellas. Durante este encuentro ambos personajes aprenderán a conocerse y valorarse, y así llegar un entendimiento mutuo que los llevará a encontrar lo esencial y simple de la vida. Entregando así, un mensaje de amistad, contra el prejuicio, la diferencia, y el entendimiento de la libertad y el amor.
“Estoy muy feliz, tuvimos mucho público, esto es el resultado de los 4 meses de trabajo, donde el elenco tuvo que trabajar mucho con la marionetas, cantar y eso hace que la obra tenga una llegada participar en el público porque llega de lo visual, lo auditivo, desde los distintos lugares donde niños como adultos pueden entender el mensaje en distintas dimensiones que es para que todos aprendamos del mensaje que entrega la obra” destacó Fernando Montaranes Director del montaje.
Este trabajo escénico, que realizó gracias al apoyo de un Fondart Regional en la línea de creación entregado por el Ministerio de las Culturas, las artes y el Patrimonio; es el quinto montaje familiar de la compañía MB2 que dirige Montanares y está formada por un elenco integrado por: Paloma de Galvez, Cecilia Acuña y Antonina Valderrama en la actuación, la composición e interpretación musical está a cargo de Luis Faundez, el Diseño integral ha sido realizado por David Coydan, David Cordova y Marcia Meza.
Luis Faúndez, destacado compositor y músico ariqueño, explica parte de su labor: “Fue un trabajo colectivo en muchas partes, mi rol estuvo ligado a hacer que todo tuviera una hilo conductor a través de las melodías que iba haciendo, en un momento fue complicado, hubo que hacer un ejercicio conceptual que implicó una desconstrucción de la misma guitarra, que es mi instrumento para componer, para lograr así, que toda la música quede trazada bajo la misma línea rítmica. Sin duda una experiencia diferente, mi rol dentro de la obra es distinto a lo que había hecho antes, a ello sumándole el tiempo y la contingencia, llevó al límite el trabajo artístico, lo cual pese al cansancio beneficia mucho y se hace posible gracias al equipo que hay en esta producción”.
A raíz del éxito de audiencias de las 7 funciones anteriores, es que este miércoles 18 de diciembre la obra se presentará nuevamente y por última vez en la sala del MB2, ubicada en Alejandro Azolas 2116 a partir de las 20:00 horas. La entrada es liberada y se puede ir con niños y niñas desde los 9 años de edad.